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Si vemos que algo anda mal en nosotros mismos, sepamos que no estamos en unidad, la cual es la manifestación de Dios mismo, no se puede estar mal en presencia de Dios!
Podemos abrir nuestro corazón y Ser en Unidad.
En Unidad Todo Sana. Todo Fluye. Todo es Perfecto. Allí habita la Felicidad.
Debemos ser filtros de las bajas vibraciones, ser más amorosos, para que la oscuridad pase y se desvanezca, para que la luz brille más intensamente.
Si lo que nos rodea nos enlaza a bajar de vibración, debemos ver la luz, siempre está. Y eso será lo que nos Una.
Por eso debemos trabajar también en nosotros mismos: para limpiarnos y ser mejores filtros.
Los rezagos humanos de lo que vayamos limpiando en nosotros seguirán brotando por un tiempo.
Mas cuando eso mismo ha sanado en el espíritu, el todo invade la realidad. Sana así el cuerpo, sana así la mente.
Somos herramientas. Trabajamos para la luz.
Llegamos sabiendo que volveremos, vivamos contentos entonces, pero sin olvidar nuestra verdad.
No venimos a despojarnos de nuestra humanidad, ya que no es eso lo que somos.
Venimos a irradiar la luz de nuestras almas que tantas veces elegimos oprimir.
Elijamos ser, aceptar nuestro designio, despleguemos las alas de nuestro corazón y abracemos el cielo.
yo vivo en una ciudad gris, con una catedral de casi mil años, con mas de 100 gargolas q bendijeron con el agua de sus bocas a los desdichados siglos y siglos en la oscuridad
ResponderEliminarmas aun en esta ciudad, seria interesante sentirse de tal forma como para escribir lo q leo que escribis.
seguiré leyeno, sin dudas